jueves, 28 de mayo de 2015

Mi método para pintar al óleo





Dado que he dejado de pintar para dedicarme a escribir, he decidido contar mi método.
Lo considero mío, porque lo conseguí al cabo de muchos años de experimentación.
Es costoso, largo y trabajoso pero el resultado merece la pena.


Materiales de trabajo:

_Un estudio bastante grande.
_Una o varias mesas con caballetes de 3 baldas (el propósito de las baldas es mantener los cuadros horizontalmente para que se sequen).
_Como paleta utilizaba una tabla de madera grande, para trabajar los colores.


Tubos de óleo grandes:

 _Blanco mezclado
_Tierra de siena natural
_Azul ultramar oscuro
_Carmín de Granza

_Esencia de trementina
_Barniz de retoques

_Brochas planas para preparar los lienzos.
_Pinceles oreja de buey (varios tamaños)

Tarros de cristal
Trapos de algodón (cuanto mas lavados, mejor)
Aguarrás

Los lienzos 3D son muy bonitos pero dan mucho trabajo porque hay que pintar los bordes.

Para preparar una exposición, es preferible que todos los bastidores sean del mismo tamaño por razones de estética.

Antes de empezar a trabajar tengo que saber exactamente lo que voy a pintar.
Tanto si el tema es figurativo como abstracto, es necesario haber trabajado los bocetos hasta el límite para conseguir una síntesis de lo que se quiere expresar.

Con este método se pueden hacer correcciones pero siempre se notará el pentimento, lo cual en principio no es un problema, pero la nitidez resultante de un cuadro en el que todos los pasos han sido impecables, es inigualable.
Recomiendo pintar series de cuadros con el mismo tema.
De esta manera cada vez que empiezo una sesión, abarco varios cuadros, puesto que todo se hace a base de veladuras.
Se pinta de pie sobre una mesa horizontal.
Mejor si se puede dar la vuelta a la mesa andando para no tener que mover demasiado los cuadros.

Sobre un lienzo con una preparación industrial en blanco, doy una veladora de azul ultramar oscuro, mezclado con esencia de trementina.
Utilizo una brocha plana de buena calidad para que no suelte pelos.
Le paso un trapo para igualar la superficie y dejo que se seque.
Cuando está seco encajo el dibujo con un pincel fino, impregnado de carmín de Granza mezclado con esencia de trementina.
Las formas del encaje deben ser muy definidas, teniendo en cuenta que las pintaré de un color uniforme.
Con un trapo de algodón, seco las lineas del encaje para que quede una línea seca y definida en la que se vean con claridad los planos que tengo que pintar.
Antes de empezar a pintar debo asegurarme de que todo está impecable ya que pintando con mi método que es a través de veladuras, todas las capas se ven en el resultado final.
Es necesario que cada paso sea impecable.

Dependiendo de lo que me interese, puedo dejar las líneas de carmín de Granza o taparlas.

Para ir manchando el lienzo mezclo los colores en la paleta y cuando he decidido el color deseado lo trabajo y lo mezclo con barniz de retoques.
Con esa pintura bien diluida doy una veladora homogénea en la superficie elegida.
Lo dejo apartado para que seque.
Y así sucesivamente.
Sesiones cortas y constantes.
Hasta que la veladura no esté seca no puedo dar la siguiente, por lo que el proceso de esta manera de pintar al óleo resulta largo.
Sin embargo el resultado es tan neto y limpio que merece la pena.

Dado que en todas las veladuras se ha mezclado el óleo con barniz, no es necesario barnizar al terminar de pintar.
Sin embargo, es imprescindible esperar mucho tiempo para el secado.
Algunos textos, como por ejemplo el Max Doerner, asegura que nunca secará.

Considero que éste método es mío porque lo configuré a través de toda una vida de dedicación a la pintura en la que he tenido grandes profesores y acceso a los estudios de artistas extraordinarios.
Poco a poco, a medida que iba desarrollando mi propio estilo, casi sin darme cuenta llegué a mis propias conclusiones.
El resultado es la expresión de mi misma.

A pesar de que mi escritura todavía no está consolidada, creo que se pueden usar las mismas palabras para describir ambas.




miércoles, 27 de mayo de 2015

Una puesta al dia








De todos los blogs que pertenecen a mi “Autobiografía en blogs” y que mantengo actualizados, el que me resulta mas problemático, es el que se refiere a mi producción artística o sea éste.

Ya he contado en alguna ocasión que YouTube me robó mas de mil videos en los que tenía registrada la mayor parte de mi producción.
La desaparición de esos videos tuvo lugar cuando publiqué la performance “Conversaciones con Thomas Krens” a la que no me ha quedado mas remedio que cambiar ese nombre por “Desde el anonimato”.


Una y otra vez intento arreglar, ordenar y poner al día este blog para mantener registrado mi trabajo, pero por motivos que desconozco no logro conseguirlo.

Aún así, lo intento una y otra vez.

jueves, 14 de mayo de 2015

el tiempo hoy (publicado el 08/06/2013)













Mi proyecto REDES SOCIALES está basado esencialmente en la experimentación de utilizar éstas desde una perspectiva conceptual en la que sin salir de lo que ofrece mi relación con el ordenador e internet puedo crear algo que tenga sentido dentro del campo artístico visual.
Una parte intrínseca consiste en hacer públicos los pasos que voy dando para comprobar si el funcionamiento es correcto.
Mi confianza en que la inspiración viene a mi en el momento exacto de la manera correcta es inquebrantable.



Dado que youtube no solo usurpó todos mis videos que eran mas de mil sino que me tiene prohibida la entrada los publico en vimeo.

miércoles, 13 de mayo de 2015

sábado, 9 de mayo de 2015

LA LOCURA LO CURA VIDEO_CONFERENCIA_PERFORMANCE

LA LOCURA LO CURA

VIDEO_CONFERENCIA_PERFORMANCE

Posted by Blanca Oraa Moyua on Sábado, 3 de diciembre de 2011

viernes, 8 de mayo de 2015

Una acción aparentemente pequeña







He tardado mucho tiempo en transgredir las leyes de Euskaltzandia.
Siento mucho respeto por las palabras y las leyes que las rigen, pero ha llegado un momento en que he tomado la decisión de hacer de mi capa un sallo.
Excepcionalmente, por supuesto.
Se trata del apellido de mi padre, Oraa, que es el que yo utilizo.
Ya es bastante difícil de por sí.
Lo pronuncian bastante bien en Madrid porque lo conocen: hay una calle que se llama General Oráa a la que le han puesto un acento en la primera “a”.
Allí hacen lo que les da la gana y ni se les ha ocurrido que es un apellido vasco que viene de Zumárraga y que los nombres vascos no llevan acento.
Por lo menos eso es lo que me enseñaron a mi desde pequeña y como probablemente me lo dijo mi padre, le creí y he tenido que vivir toda mi vida teniendo que soportar que cada vez que dicen mi nombre, digan Ora que suena fatal.
En esos casos o bien me aguanto lo cual resulta bastante molesto o digo “Oraa con dos aes" que también me resulta incómodo.
Unas veces me entienden y otras no; en ambos casos me causa cierto desasosiego.
En países de habla inglesa siempre me llaman Ora y no me importa, ni siquiera les corrijo, no tendría sentido.
Además les encanta porque suena a aura, lo que mezclado con mi nombre cuyo significado suelen conocer, les da la sensación de que tengo el aura blanca y eso es señal de que podría estar iluminada y así ad infinitum.
Algunas personas no me creen cuando digo que es un apellido vasco, les parece raro.
La verdad es que a mi también me parece un poco raro.
En Australia no resultaría tan raro porque allí usan mucho dos "oes" seguidas en los nombre de lugares, como Twoowoomba.
Jorge Oteiza me decía que tuviera cuidado con Euskaltzandia porque eran capaces de meter una chimenea (se refería a una “h” entre las dos “aes”).
A Luis Berlanga le parecía surrealista.
Y a mi me da tanto trabajo que he decidido desobedecer a Euskaltzandia y liberarme de una vez por todas de algo que me resulta desagradable y con lo que he convivido demasiado tiempo.
Así que ayer, ni corta ni perezosa, cuando firmé un papel en el banco de Bilbao, me pareció el momento adecuado para llevar a cabo una acción aparentemente minúscula, pero inmensa para mi y de enorme repercusión personal: al firmar, estampé un acento en la segunda "a" y me quedé muy satisfecha.

Blanca Oraá





Ojalá no hubiera hecho lo que hice con el apellido de mi madre que tantos sinsabores me crea cuando viajo sobretodo.





lunes, 4 de mayo de 2015

El Athetic







Empecé a trabajar en el proyecto sobre el Athletic en el año 1984. 
Tuvo bastante repercusión.

A principios de 2004 volví con ganas de hacer un trabajo que expandiera el concepto de lo que hasta ahora llamamos Athletic.
El comienzo fue similar al anterior: ceras sobre fotocopias ampliadas.

Sin embargo mi proyecto actual es muy ambicioso.
Es un trabajo de equipo.
Mi primera intención era hacer exposiciones simultáneas, invadir Bilbao con mis ceras, pero no lo conseguí.
Hice varias exposiciones, una detrás de otra.

También encargué camisetas con el abrazo de Echeverria y González.
El equipo AAA hizo una acción en San Mamés, cuyo resultado no fue espectacular.
Yo hice otra acción en "El corte inglés" en donde intervino la policía, confiscaron parte del material expuesto, por lo que puse una denuncia en el juzgado y a mi me han puesto una multita de 2000 euros.
Propuse al director de cultura de la diputación de Bizkaia que utilizara mi proyecto para organizar una fiesta en toda regla en la que pudieran participar todos los aficionados al Athletic sin excepción y los demás también. 
Presenté un dosier explicando minuciosamente mis ideas, las colaboraciones del equipo y los presupuestos. 
Fue amable.
Anteriormente había presentado el proyecto de una manera informal al gerente del Athletic y no solo no obtuve la respuesta deseada sino algo bastante peor.